TRIBUNA ABIERTA

Una nueva educación se abre paso
Por Guillermo García Samamé
Publicado en El Peruano

Saludamos el coraje y la valentía de los miles de profesores que se inscribieron y dieron un paso firme con su participación para acceder a la nueva Ley de Carrera Pública Magisterial (CPM) y mejorar así su capacidad profesional, sus remuneraciones y la calidad de vida de sus respectivas familias.

La reciente convocatoria para el examen ha sido exitosa, hay que tener en cuenta que representa más del ciento por ciento, en cantidad de docentes, de los que participaron el año pasado. A pesar de las contracampañas se están abriendo cada día más las compuertas del entendimiento y la comprensión de los docentes, quienes al ingresar a la CPM impulsan una nueva educación en el Perú basada en el mérito y el esfuerzo.

De los 25 mil profesores que se inscribieron más del 90 por ciento dieron el paso decisivo el pasado 27 de junio.

En este sentido, como se ha afirmado, “una de las razones de instituir la CPM es desterrar el nombramiento a dedo”, teniendo en cuenta que tanto daño le ha hecho al país permitiendo que la educación de nuestros niños y jóvenes caiga en la mediocridad y la decadencia. ¿En qué consistió la prueba nacional clasificatoria? Indudablemente, una evaluación responde a los indicadores que han salido después de rigurosos análisis y diagnósticos para evitar la improvisación.
El pasado domingo 27 de junio, la prueba nacional eliminatoria estuvo diseñada bajo las siguientes unidades temáticas: habilidades en comunicación (25 puntos), lógico-matemáticas (25 puntos), conocimientos pedagógicos generales (30 puntos) y conocimientos pedagógicos específicos (20 puntos).
Quienes alcanzaron la nota 14, que es el puntaje mínimo, accedieron a la segunda fase del proceso o evaluación específica del docente. Esto significa que han entrado en una carrera ascendente, que la sola participación demuestra el querer mejorar y adecuarse a un nuevo régimen de prosperidad mutua.

En esta segunda etapa se ha considerado la formación del postulante (15 puntos), reconocimiento de sus méritos (10 puntos), la experiencia profesional (5 puntos), el desempeño profesional (10 puntos) y la prueba de idoneidad (60 puntos), que consistió en una prueba de especialidad, con un puntaje de 60 para los postulantes al II y III nivel de la CPM. Hay que tener en cuenta que la evaluación de idoneidad para los postulantes al IV Nivel de la CPM ha tenido las siguientes pruebas: especialidad (30 puntos), capacidad didáctica (20 puntos) y uso adecuado de las Tecnologías de la Información y Comunicación (10 puntos). Todo esto no es más que el fiel reflejo que un docente está ya dentro de los patrones que exige este mundo competitivo. No olvidemos que la acreditación es uno de los soportes de esta modernidad. Pues estas nuevas generaciones de alumnos nacen con toda la tecnología a su disposición. Por eso urge que los docentes se adecuen a las nuevas tecnologías.

Por otro lado, para quienes aspiraron al V Nivel de la CPM en la evaluación de idoneidad han rendido las pruebas de especialidad (30), capacidad didáctica (20 puntos), uso adecuado de las Tecnologías de la Información y Comunicación (5 puntos) y dominio básico de inglés o lengua originaria (5 puntos).