jueves, 11 de marzo de 2010

TRIBUNA ABIERTA

Los frutos de un nuevo magisterio
Editorial – El Peruano

La educación en el Perú ha ingresado en una etapa de franco resurgimiento, se diría mejor de renacimiento, con base en la evaluación y capacitación constante de los maestros y bajo el impulso de un esfuerzo sin precedentes desplegado por el Gobierno para construir, recuperar y equipar locales escolares, y distribuir textos y uniformes escolares, priorizando a los sectores más pobres de nuestra población.

El éxito de una reforma educativa solamente se puede medir por los resultados en el rendimiento escolar, en el cumplimiento de las metas trazadas.

En la exposición del ministro de Educación, José Antonio Chang, sobre los logros de su sector en los últimos años, el presidente de la República, Alan García Pérez, ha subrayado que la evaluación magisterial ha marcado una “etapa sustantiva” para el Estado peruano y para nuestra sociedad en su conjunto, puesto que se ha convertido en la columna vertebral de todos los progresos alcanzados en calidad educativa.

Ha señalado que en el país hubo experiencias “rimbombantes y artificiales” de reforma educativa, pero que no arribaron a acciones concretas.
En efecto, los avances cualitativos son evidentes. Así lo reconoce la opinión pública, lo determinan los análisis y estudios realizados por los especialistas y lo han confirmado y destacado Naciones Unidas y la Unesco.

Este último organismo reconoce que el Perú avanza sostenidamente en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio en materia educativa, sobre todo en aspectos como alfabetización, universalización de la educación básica y la educación intercultural.

El presidente García ha señalado que la instauración de la evaluación magisterial permanente y sostenida garantiza de hecho una mejor enseñanza y se ha convertido en el valor fundamental para definir el ascenso y los sueldos en Educación.

Es la cultura de la “meritocracia”. La única forma de gestar un nuevo magisterio y de alcanzar la excelencia académica en todos los niveles de la educación básica, cimiento sólido para la formación de las nuevas generaciones de peruanos.

En su balance, el ministro José Antonio Chang ha precisado que el Gobierno otorga máxima prioridad a la evaluación y capacitación de docentes y que, por esta razón, invertirá más de 150 millones de nuevos soles en el Programa Nacional de Formación y Capacitación Permanente (Pronafcap).

Recordó que para forjar este nuevo magisterio se ha invertido 94 millones 121 mil 828 nuevos soles en 2007; 119 millones 471 mil 930 nuevos soles en 2008 y 85 millones 498 mil 242 nuevos soles en 2009.

El Perú grande que todos estamos forjando necesita con urgencia de una educación de primera calidad.

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