TRIBUNA ABIERTA
Educación, una palabra mayor
Editorial – El Peruano
Un hito histórico para la educación peruana significará el funcionamiento del Colegio Mayor Presidente del Perú, a partir del 15 de marzo de este año en el Centro Vacacional Huampaní, del distrito de Chaclacayo.
Allí estudiarán cerca de 900 alumnos de alto rendimiento académico, provenientes de todo el país, quienes están llamados a convertirse en líderes de nuestra juventud estudiosa y de nuestra sociedad en su conjunto.
Reunidos en un ambiente motivador y propicio para alcanzar la excelencia en su formación, ellos conforman ahora parte de la elite escolar de nuestro país.
Precisamente por esta razón el Colegio Mayor Secundario será un referente y paradigma, un auténtico modelo para los colegios de todas las regiones.
El presidente de la República, Alan García Pérez, al explicar la importancia de este gran proyecto piloto de la educación secundaria estatal, manifestó hace poco que, en un futuro cercano, cada región y cada ciudad principal del Perú deberá también contar con su respectivo colegio mayor que dé formación de primera calidad a los mejores alumnos de la circunscripción.
Resulta muy significativo que en el examen de admisión para estudiar en este colegio emblemático, los tres primeros lugares fueron ocupados por estudiantes mujeres.
Este hecho dice mucho del papel preponderante y cada día más protagónico que viene desempeñando la mujer peruana en la escena nacional.
Y hay más lecciones que nos dicta la creación de este colegio mayor. Una de ellas es la validez de lo que el presidente García ha denominado en el campo de la educación, refiriéndose a la formación de nuestros maestros: la meritocracia, como un camino válido para vencer a la mediocridad y la decadencia en las aulas.
La ciudadanía valora y respalda la creación de este primer colegio mayor y por eso recibe con beneplácito la información oficial de que el Estado proporcionará a los alumnos ingresantes alimentación, útiles, vestido, calzado y equipos modernos para su formación.
El país está seguro que los alumnos beneficiados no defraudarán y que su talento y dedicación pronto rendirán excelentes resultados.
Recuperar la excelencia académica y derrotar a la mediocridad, es tarea urgente de padres, alumnos y maestros en toda la patria.
Editorial – El Peruano
Un hito histórico para la educación peruana significará el funcionamiento del Colegio Mayor Presidente del Perú, a partir del 15 de marzo de este año en el Centro Vacacional Huampaní, del distrito de Chaclacayo.
Allí estudiarán cerca de 900 alumnos de alto rendimiento académico, provenientes de todo el país, quienes están llamados a convertirse en líderes de nuestra juventud estudiosa y de nuestra sociedad en su conjunto.
Reunidos en un ambiente motivador y propicio para alcanzar la excelencia en su formación, ellos conforman ahora parte de la elite escolar de nuestro país.
Precisamente por esta razón el Colegio Mayor Secundario será un referente y paradigma, un auténtico modelo para los colegios de todas las regiones.
El presidente de la República, Alan García Pérez, al explicar la importancia de este gran proyecto piloto de la educación secundaria estatal, manifestó hace poco que, en un futuro cercano, cada región y cada ciudad principal del Perú deberá también contar con su respectivo colegio mayor que dé formación de primera calidad a los mejores alumnos de la circunscripción.
Resulta muy significativo que en el examen de admisión para estudiar en este colegio emblemático, los tres primeros lugares fueron ocupados por estudiantes mujeres.
Este hecho dice mucho del papel preponderante y cada día más protagónico que viene desempeñando la mujer peruana en la escena nacional.
Y hay más lecciones que nos dicta la creación de este colegio mayor. Una de ellas es la validez de lo que el presidente García ha denominado en el campo de la educación, refiriéndose a la formación de nuestros maestros: la meritocracia, como un camino válido para vencer a la mediocridad y la decadencia en las aulas.
La ciudadanía valora y respalda la creación de este primer colegio mayor y por eso recibe con beneplácito la información oficial de que el Estado proporcionará a los alumnos ingresantes alimentación, útiles, vestido, calzado y equipos modernos para su formación.
El país está seguro que los alumnos beneficiados no defraudarán y que su talento y dedicación pronto rendirán excelentes resultados.
Recuperar la excelencia académica y derrotar a la mediocridad, es tarea urgente de padres, alumnos y maestros en toda la patria.
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