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Los niños y el desarrollo sostenido
Por Gastón Garatea - El Peruano

El Grupo Impulsor de Inversión en la Infancia, que ha nacido para promover una conciencia nacional sobre la impostergable necesidad de invertir en la alimentación, salud y educación de nuestros niños y niñas, en el marco de un desarrollo sostenible del país, ha promovido la elaboración de un Pacto Ciudadano por la Primera Infancia.

La redacción de este pacto fue la culminación del Encuentro Nacional Inversión en la Infancia como Factor Clave para la Erradicación de la Pobreza, organizado en noviembre pasado por el mencionado grupo impulsor.

En este encuentro nacional sobre la infancia, en el que participaron importantes especialistas en desarrollo social y económico, así como líderes regionales y autoridades nacionales, se debatieron temas cruciales para el desarrollo de la infancia.
Se analizó la salud infantil, educación en la primera infancia, economía, inversión y gasto social en programas para la primera infancia; responsabilidad social y ciudadana para la inversión efectiva en primera infancia.

El referido pacto es un documento que tiene diez puntos, ha sido propuesto a las autoridades nacionales, regionales y locales, y a los partidos políticos, para que se comprometan con su cumplimiento.
Allí figuran compromisos para priorizar en la agenda de las políticas y programas del Gobierno Nacional y de los gobiernos regionales y locales la inversión para el desarrollo de la primera infancia; garantizar un presupuesto nacional, regional y municipal a favor de la primera infancia que sea intangible y suficiente; exigir que en las elecciones nacionales, regionales y municipales todos los candidatos asuman el compromiso de priorizar la inversión en la primera infancia.

Orientar, asimismo, los esfuerzos para reducir la mortalidad materno-infantil y la desnutrición infantil a cero; exigir la creación inmediata de un ente con rango ministerial que dirija la planificación y ejecución de las políticas y programas dirigidos a la primera infancia.
Se expresa también la necesidad de promover la creación de servicios de calidad –tales como wawa wasis, centros de educación inicial, programas de desarrollo infantil temprano– que aseguren oportunidades óptimas de desarrollo para todos los niños menores de 5 años; fomentar más programas que respeten la diversidad cultural y social dirigidos a las familias y a las comunidades para que sean escenarios propicios para el desarrollo de la primera infancia.

Se busca además comprometer a los medios de comunicación, a las entidades públicas y privadas, y a la sociedad civil en general para que informen permanentemente sobre la importancia del desarrollo de nuestra primera infancia.
El pacto es un llamado urgente a un compromiso nacional para priorizar la inversión a fin de que nuestros niños tengan la oportunidad de desarrollar todas sus potencialidades.
Priorizar la inversión en la infancia es una necesidad humanitaria o de sensibilidad social, y, a la vez, de desarrollo económico sostenible como país.

Se requiere mejorar con urgencia tres aspectos fundamentales: alimentación y nutrición, combatir la desnutrición y la anemia que afectan el desarrollo físico y mental de más de medio millón de niños y niñas; la salud y la educación. La mejor inversión para la lucha contra la pobreza es invertir en la infancia.
Los niños no votan, no protestan, no hacen huelgas, no toman carreteras, tal vez por eso están postergados, al margen de las agendas políticas.

No se invierte en los niños ni en sectores como educación o salud lo que se debería invertir, porque el producto de esa inversión se ve después de varios años.
La inversión en la infancia siempre se deja para después, pero es urgente invertir ahora en los niños y niñas, no mañana, porque ellos existen hoy y tienen derecho a crecer en buenas condiciones y ser felices.

No se puede hablar de un exitoso crecimiento económico completo si subsisten, paralelamente, altos niveles de desnutrición infantil y graves problemas para acceder a una educación de calidad. Debe haber una política nacional que nos comprometa a todos, a favor del desarrollo de la primera infancia. A ese objetivo apunta el Pacto Ciudadano por la Primera Infancia.