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Educador Héctor Valdés y la experiencia cubana
En Cuba la evaluación del docente se realiza mediante la observación en clases

El Dr. Héctor Valdés Veloz, Presidente del Laboratorio de Evaluación de Políticas Educativas de América Latina, manifestó que Cuba tiene una política para la evaluación de los docentes que data de 1917, sustentada en el método de la observación en clases. Es decir, no hay pruebas a los maestros, sino una comisión integrada por los principales actores de una institución educativa: directivos, padres de familia, sindicato del docente evalúan al profesor mediante este método que les permite tener una visión más integral de su desempeño profesional.
En su diálogo con Hablaeducación contó acerca de la experiencia cubana.

Uno de los temas más sensibles es la evaluación de los docentes, el gobierno peruano empezó hace algunos años esta evaluación que por distintos motivos generó críticas. ¿Porqué evaluar a los docentes y cómo hacerlo?

En general la evaluación es un tema y una política que debería ser extendida a todos los actores que hacen a la educación, desde el propio estudiante, los directivos de todos los niveles e incluso al padre de familia. Sólo que al sistema educativo le toca evaluar a los agentes que están directamente relacionados con su gestión: estudiantes, profesores y directivos del nivel central, niveles intermedios y escuela.
Durante mucho tiempo, uno de los problemas es haber hablado sólo de los estudiantes, y entonces América Latina como Región ha estado atrasada en la incorporación a la evaluación del resto de los actores, se trata entonces de ir incorporando poco a poco políticas de este tipo con carácter holístico. En el caso particular de la evaluación del desempeño a los docentes, el problema está en una cierta actitud de sospecha hacia la política que viene desde arriba, y por lo tanto se requiere de mucha sensibilización, demostrar con datos científicos, con estudios resultados de investigaciones prueben que efectivamente esta política puede contribuir de manera decisiva al mejoramiento de la calidad educativa, y usar como una herramienta esencial el hecho que se evalúa a los maestros para mejorar su desempeño y elevar su desarrollo profesional.

Cuba es un país con un sistema educativo que está a la cabeza en América Latina. ¿Cómo se evalúa en su país a los docentes y cuál es el método?

En mi país, la evaluación del desempeño docente es una política de larga data, que nació en 1917, hace más de 92 años. En realidad en los tiempos actuales, en la educación en revolución, ha sido una política muy alimentada por la investigación educativa, y en ese sentido los resultados de la investigación se han incorporado a esta política para perfeccionarla tanto en sus indicadores de criterios como en los instrumentos a utilizar. En particular el método que utilizamos es la observación de clases, a cada docente se le observa entre 8 y 12 clases en cada ciclo escolar; esto permite verlo en sus desempeños en sus distintos tipos de clases, y ayuda a tener una visión bastante integral de su desempeño. Además, se entrevista a los padres, se encuesta a los alumnos, y todo ello tributa a una triangulación metodológica que permite un mayor acercamiento a lo que de verdad está pasando en el aula.

Cada año se evalúa al ciento por ciento de los maestros, y lo evalúa una comisión en la que se encuentran directivos de las organizaciones estudiantiles, directivos de padres de familia, directivos del sindicato de maestros a nivel escolar y el jefe técnico del docente.

En general hay muchas fuentes de datos para esa evaluación. En primer lugar, los resultados de su trabajo, en segundo lugar sus capacidades pedagógicas, preparación profesional, su desempeño ético en la escuela y en el aula, son tres de los grandes parámetros que se utilizan en la evaluación. No hacemos pruebas a los maestros, lo que consultamos desde el punto de vista profesional a través de encuestas, pero en realidad no hay tradición de evaluar lo que sabe un maestro, el que quiera evaluar lo que un maestro sabe que vaya a su aula.

¿Qué consecuencias habría si no aprueba esta evaluación de desempeño al interior de la misma aula?
Si bien no es demasiado grande el número, entre el 1 y 3% de los docentes del país, estamos hablando de un promedio de 250 mil docentes que tiene la planta nacional educativa de Cuba, resultan mal evaluados. Lo que se hace es concederles un año sabático estudiando en la Universidad Pedagógica de su provincia en cursos que tienen elementos teóricos y prácticos que son evaluados. Si el docente reprueba esa evaluación de un año donde disfruta del salario completo, entonces se prescinde definitivamente del servicio como docente y se le ofrece un cargo de menor categoría dentro del sistema educativo