DESTACADOS
Edgar Morín: el maestro no solo es una profesión sino una misión fundamental
El pasado 28 de agosto, el pensador Francés, Edgar Morin sostuvo un intenso diálogo con cientos de maestros peruanos, quienes tuvieron la oportunidad de hacerles llegar sus preguntas sobre educación intercultural; educación, formación, producción; y aprender en la incertidumbre. Este evento organizado por la Derrama Magisterial, Foro Educativo, el Consejo Nacional de Educación (CNE) y la Embajada de Francia en el Perú, permitió analizar una necesaria reforma en la educación , por ello recogimos los principales fragmentos del conversatorio y la opinión de especialistas y educadores que participaron en este importante encuentro.
Durante el conversatorio el destacado filósofo, señaló la necesidad de no desligar la noción de unidad de la noción de diversidad. “Una nación es un conjunto de etnias, no existe una sola cultura, ni un solo lenguaje, por ello es necesario conocer y respetar las culturas tradicionales y realizar un enseñanza bilingüista, pienso que es muy negativo el tema de homogeneizar”.
Asimismo, hizo hincapié reenseñar una educación integradora. “La comprensión lucha contra cosmovisión del saber y de la cerradura de las disciplinas. Considero que es un error que no debemos apoyar el tema la separación de las disciplinas y las especializaciones, dado que no permite observar y analizar los problemas fundamentales”.
En otro momento resaltó la necesidad de enseñar a anticipar la llegada de lo imprevisto. “Nosotros debemos prever y advertir las tendencias. el conocimiento es un juego de incertidumbres, pero hay que enseñar que hay islas a las que debemos llegar”.
Por otro lado Morín calificó la labor del maestro como una misión social fundamental. “Es necesario cambiar el sentido de la palabra “desarrollo” porque se cree que sólo se relaciona con lo nuevo, cuando hay valores y saberes en las tradiciones de los pueblos que son importantes y deben ser tomados en cuenta”.
Para la educadora y asociada de Foro Educativo Gretel Inti, la visita del gran pensador Edgar Morin, logró sembrar en cada uno de participantes una urgente necesidad de reflexionar sobre una nueva forma de pensar, de conocer y educar para el futuro y el presente. “Morin dijo que la información es múltiple y variada y que se puede perder si es que no se articula y da origen al conocimiento. Al abordar el tema de la escuela y el maestro manifestó que habría la necesidad de reinventar la escuela. Ahí acotó, que hay un tipo de enseñanza que estimula la curiosidad y otro que la mata. Finalmente nos dejó un mensaje muy importante al recordar que el maestro no solo es una profesión, fundamentalmente es una misión”.
Para, Edmundo Murrugarra, consejero de Consejo Nacional de Educación, fue muy importante la masiva respuesta de maestros y maestras interesados en conocer y reflexionar sobre una reforma en la educación actual. “El medio millar de maestros regresaran a sus aulas, comprendiendo las raíces de la aburrida esterilidad de lo que como saber científico se ofrece en la mayoría de institutos pedagógicos y universidades con la formación inicial y los PRONAFCAF que contrata el Ministerio de Educación.”
“Entre los puntos importantes, Morin sostiene que la complejidad e incertidumbre lejos de paralizar la acción del ser humano, lo llevan a asumir su responsabilidad ética en la construcción del conocimiento y a tomar la acción, la vida misma, con la dignidad de una apuesta con riesgos que nosotros mismos creamos. Muy lejos, de la comodidad que descansa en el paradigma occidental con su visión del conocimiento como reflejo fidedigno de la realidad”.
Murrugarra, agregó uno de los puntos importantes fue la crítica demoledora que Morin hace a la educación basada en disciplinas, actualmente agrupadas en áreas y que conforman el currículo. “La disciplinas son construcciones abstraídas que por más que se imaginen estrategias didácticas para darles sentido, significado, para hacerlas atractivas para los estudiantes, carecen del atractivo emocional porque están lejos del vivir, de la palpitación vital con sus deseos y sueños. La jerga oficial llama los temas transversales, que nunca llegan a tomar la fortaleza del currículo donde se parapetan las disciplinas. Como ejemplo puso las creaciones artísticas que, como la música y la literatura, atrapan y elaboran la sustancia de los afectos más estremecedores y, por eso, ofrecen un inmenso potencial cognitivo. En nuestro currículo son desganadas actividades marginales en el calendario y horario escolares y para estudiantes y maestros marginales. Y seguimos con aquello de lo cognitivo separado de lo afectivo y de lo operativo.
El pasado 28 de agosto, el pensador Francés, Edgar Morin sostuvo un intenso diálogo con cientos de maestros peruanos, quienes tuvieron la oportunidad de hacerles llegar sus preguntas sobre educación intercultural; educación, formación, producción; y aprender en la incertidumbre. Este evento organizado por la Derrama Magisterial, Foro Educativo, el Consejo Nacional de Educación (CNE) y la Embajada de Francia en el Perú, permitió analizar una necesaria reforma en la educación , por ello recogimos los principales fragmentos del conversatorio y la opinión de especialistas y educadores que participaron en este importante encuentro.
Durante el conversatorio el destacado filósofo, señaló la necesidad de no desligar la noción de unidad de la noción de diversidad. “Una nación es un conjunto de etnias, no existe una sola cultura, ni un solo lenguaje, por ello es necesario conocer y respetar las culturas tradicionales y realizar un enseñanza bilingüista, pienso que es muy negativo el tema de homogeneizar”.
Asimismo, hizo hincapié reenseñar una educación integradora. “La comprensión lucha contra cosmovisión del saber y de la cerradura de las disciplinas. Considero que es un error que no debemos apoyar el tema la separación de las disciplinas y las especializaciones, dado que no permite observar y analizar los problemas fundamentales”.
En otro momento resaltó la necesidad de enseñar a anticipar la llegada de lo imprevisto. “Nosotros debemos prever y advertir las tendencias. el conocimiento es un juego de incertidumbres, pero hay que enseñar que hay islas a las que debemos llegar”.
Por otro lado Morín calificó la labor del maestro como una misión social fundamental. “Es necesario cambiar el sentido de la palabra “desarrollo” porque se cree que sólo se relaciona con lo nuevo, cuando hay valores y saberes en las tradiciones de los pueblos que son importantes y deben ser tomados en cuenta”.
Para la educadora y asociada de Foro Educativo Gretel Inti, la visita del gran pensador Edgar Morin, logró sembrar en cada uno de participantes una urgente necesidad de reflexionar sobre una nueva forma de pensar, de conocer y educar para el futuro y el presente. “Morin dijo que la información es múltiple y variada y que se puede perder si es que no se articula y da origen al conocimiento. Al abordar el tema de la escuela y el maestro manifestó que habría la necesidad de reinventar la escuela. Ahí acotó, que hay un tipo de enseñanza que estimula la curiosidad y otro que la mata. Finalmente nos dejó un mensaje muy importante al recordar que el maestro no solo es una profesión, fundamentalmente es una misión”.
Para, Edmundo Murrugarra, consejero de Consejo Nacional de Educación, fue muy importante la masiva respuesta de maestros y maestras interesados en conocer y reflexionar sobre una reforma en la educación actual. “El medio millar de maestros regresaran a sus aulas, comprendiendo las raíces de la aburrida esterilidad de lo que como saber científico se ofrece en la mayoría de institutos pedagógicos y universidades con la formación inicial y los PRONAFCAF que contrata el Ministerio de Educación.”
“Entre los puntos importantes, Morin sostiene que la complejidad e incertidumbre lejos de paralizar la acción del ser humano, lo llevan a asumir su responsabilidad ética en la construcción del conocimiento y a tomar la acción, la vida misma, con la dignidad de una apuesta con riesgos que nosotros mismos creamos. Muy lejos, de la comodidad que descansa en el paradigma occidental con su visión del conocimiento como reflejo fidedigno de la realidad”.
Murrugarra, agregó uno de los puntos importantes fue la crítica demoledora que Morin hace a la educación basada en disciplinas, actualmente agrupadas en áreas y que conforman el currículo. “La disciplinas son construcciones abstraídas que por más que se imaginen estrategias didácticas para darles sentido, significado, para hacerlas atractivas para los estudiantes, carecen del atractivo emocional porque están lejos del vivir, de la palpitación vital con sus deseos y sueños. La jerga oficial llama los temas transversales, que nunca llegan a tomar la fortaleza del currículo donde se parapetan las disciplinas. Como ejemplo puso las creaciones artísticas que, como la música y la literatura, atrapan y elaboran la sustancia de los afectos más estremecedores y, por eso, ofrecen un inmenso potencial cognitivo. En nuestro currículo son desganadas actividades marginales en el calendario y horario escolares y para estudiantes y maestros marginales. Y seguimos con aquello de lo cognitivo separado de lo afectivo y de lo operativo.
0 comentarios:
Publicar un comentario